Jodina rhombifolia
Cervantesiácea
Nativa de Sudamérica
Su distribución abarca Argentina, Bolivia, Paraguay, Uruguay y el sur de Brasil. En Argentina es nativa y común en el Chaco y el Espinal.
Árbol de mediano porte.
Entre 3 a 5 metros de altura.
Esbelto y recto.
Ramas tortuosas y muy ramificadas, tallos grisáceos.
Castaño clara, muy gruesa y con aspecto de corcho.
De un característico color verde grisáceo, coriáceas (con la consistencia del cuero), con forma de rombo (romboidales), de 3 a 5 cm longitud, con una espina punzante en el ápice y dos espinas más cortas en los ángulos laterales.
Hermafroditas, pequeñas, de aproximadamente 5 mm de diámetro, blanco verdosas, pubescentes (con pelos) y muy perfumadas.
Globoso, carnoso, de 7 mm de diámetro, blanco pero cubierto de piezas florales de color rojo que se secan con el tiempo. Con un carozo leñoso y oscuro
Aceitosa.
Perennifolio, es decir presenta hojas todo el año. Florece de mayo a julio y fructifica de agosto a noviembre.
En medicina popular, se utiliza la corteza y la infusión de las hojas.
No. Sus hojas con una espina punzante en el ápice pueden generar accidentes en los transeúntes.
Por las hojas en forma de cruz, los campesinos lo consideran como un árbol bendito y se cobijan bajo su copa durante las tormentas eléctricas. Otros lo consideran buen meteorólogo porque cuando las hojas se cierran anuncia lluvia.